Identifica tu arquetipo venusino y conecta con tu diosa interior del placer, el disfrute y el valor propio
En la mitología romana, Venus era la diosa del amor, la belleza, los placeres y la sensualidad y es también el nombre de un planeta que, en nuestra carta natal, representa todo esto, a lo que podríamos sumar también el valor que nos damos a nosotros mismos y nuestros recursos materiales. Venus encarna el disfrute, aquello que nos gusta hacer y nos provoca placer.
Allí donde tengamos a Venus en nuestra carta natal nos va a dar información acerca de cómo nos valoramos, con qué y cómo disfrutamos, cómo seducimos y nos gusta ser seducidos, cómo amamos, qué relación tenemos con el dinero y qué tipo de personas nos resultan atractivas a la hora de establecer vínculos.
No nutrir las necesidades de nuestra Venus interna nos impide disfrutar de la vida, hace que nos restemos valor y puede afectar de forma importante nuestra autoestima, empoderamiento personal y relaciones de pareja.
Te recomiendo, en primer lugar, que identifiques aquí (link a astro.com) en qué signo del zodíaco está tu Venus. Cada signo va asociado a uno de los cuatro elementos, que es lo que vamos a explicar a continuación.
Cuando tu Venus es de fuego (signos de Aries, Leo y Sagitario)
“Sigue tu pasión, sigue a tu corazón y las cosas que necesitas llegarán”
Elizabeth Taylor (Venus en Aries)
Las venus de fuego son apasionadas, impulsivas y muy activas. Amantes de la aventura, necesitan disfrutar y vivir experiencias en las que la adrenalina sea un componente principal. La acción y el deporte es muy importante para ellas.
Por ello, para conectar con tu Venus de fuego practica algún deporte competitivo o baila zumba, aprende a canalizar tu energía creativa a través del arte o de alguna afición. Confía en tu intuición en tus relaciones. Muéstrate al mundo como la diosa que eres, sin vergüenza ni miedo. En tus vínculos, demandarás altas dosis de pasión y, si la chispa se acaba, puede que la relación también.
Si tu Venus está en Aries canaliza tu energía a través del deporte y en relaciones apasionadas. En Leo, el teatro o el baile pueden ser una buena manera de expresar tu energía venusina y, en Sagitario, los viajes a tierras lejanas te aportarán ese disfrute que tanto nutre a tu Venus aventurera.
Cuando tu Venus es de Tierra (signos de Tauro, Virgo y Capricornio)
“El trabajo aclara la mente y crea la personalidad”
Fyodor Dostoevsky (Venus en Capricornio)
Las venus de tierra son ordenadas, productivas, planificadoras y, hasta cierto punto, bastante apegadas a los placeres materiales y del cuerpo. Si tu Venus está en Tauro, pasear por la naturaleza, los placeres de la buena mesa y una sensual velada de masajes, aceites esenciales, mimos y flores pueden hacerla y hacerte muy feliz.
En Virgo, tu Venus necesita ayudar a los demás y mantener un ritmo de vida hecho de rutinas y hábitos. Es una Venus que conecta con la naturaleza, la salud y la nutrición de forma natural. Será importante para ella, que conectes con el autocuidado de tu cuerpo y mantengas unos hábitos alimenticios saludables y una vida ordenada.
La Venus capricorniana es la más austera y la más productiva de todas. Aunque a otras Venus pueda parecerles extraño, esta Venus disfruta trabajando y consiguiendo retos y objetivos, tanto para ella como para los demás. Relajarse y aburrirse no suele entrar en sus planes.
No nutrir las necesidades de nuestra Venus interna nos impide disfrutar de la vida, hace que nos restemos valor y puede afectar de forma importante nuestra autoestima, empoderamiento personal y relaciones de pareja.
Cuando tu Venus es de Aire (signos de Géminis, Libra o Acuario)
“Tú cambias el mundo siendo tú mismo”
Yoko Ono (Venus en Acuario)
Las venus de aire son las más intelectuales, curiosas y racionales de todas. Disfrutan con una buena charla, aprendiendo o compartiendo conocimiento. En sus relaciones, el componente y la sintonía intelectual con la pareja es muy importante y, en el caso de Acuario, la libertad y la originalidad también. Son Venus que necesitan divertirse y suelen huir de las rutinas y de los compromisos demasiado serios o aburridos.
Si tu Venus está en Géminis disfrutará realizando cursos de temas que te interesen o conectando con grupos de amigos o parejas con las que puedas aprender y divertirte al mismo tiempo.
Tu Venus en Libra disfruta con el arte y lo social. Necesita estar rodeada de belleza, de armonía y de personas. La moda y la estética también son muy importantes para nutrir esta Venus que buscará relaciones en las que exista un equilibrio entre el dar y el recibir.
En Acuario, Venus necesita sentirse libre e independiente. Demostrar su individualidad a través de una manera de ser o vestirse original y poco convencional. Disfruta con relaciones con personas singulares con las que pueda sentirse ella misma y donde siempre haya cambios.
Cuando tu Venus es de agua (signos de Cáncer, Escorpio o Piscis)
“Deja que el Sol brille, deja que llueva. Deja que los corazones rotos amen de nuevo”
Bruce Springsteen (Venus en Escorpio)
Las venus en agua son las más sensibles, intuitivas, intensas y espirituales. Necesitan conectar con sus emociones y sentirse seguras y protegidas, a la vez que demandan intensidad y apego en sus vínculos y relaciones de pareja.
Tu venus en Cáncer es feliz con su familia en el hogar, cuidando a niños, en su jardín o canalizando toda su sensibilidad a través de alguna actividad creativa como puede ser la decoración, la cocina o el bricolaje.
En Escorpio, tu Venus debe aprender a canalizar toda la intensidad y energía sexual a través de prácticas como el tantra o la danza del vientre, por ejemplo. Son Venus amantes del ocultismo y lo esotérico y con una gran sensibilidad artística. Ver una película de terror o pasear por un bonito cementerio para hacer fotografías puede ser una actividad que nutra ese interés por la muerte o lo tabú desde una perspectiva venusina.
Tu Venus en Piscis disfrutará cerca del mar y conectando con la parte más espiritual de la naturaleza y de las personas. A esta Venus le gusta cuidar e incluso sacrificarse por los demás. La meditación, el yoga o el Reiki son buenas herramientas para nutrirla y mantenerla feliz.